La integración de las personas con discapacidad en el mundo laboral es uno de los mayores retos sociales a los que tienen que enfrentarse estos colectivos, que en muchas ocasiones ven limitadas sus oportunidades para entrar en un mercado laboral competitivo y a veces poco empático.
La Diputación de Cáceres pretende crear al menos 125 puestos de trabajo adaptados a personas con situaciones especiales en el ámbito rural, en donde además las oportunidades se reducen. Dotado con un presupuesto de 1.500.000 euros, Diputación Integra trata de que los Ayuntamientos creen, con la ayuda económica de la institución provincial, puestos de trabajo que proporcionen autonomía a sus beneficiarios.
También hay 100.000 euros destinados a que cinco asociaciones supervisen este proceso de adaptación laboral. Y, además, se hará un seguimiento para que este programa «sea un éxito».
El próximo 29 de septiembre se llevará a pleno este plan. La idea es que en la primera quincena de noviembre se pueda empezar a poner en marcha y contratar a los beneficiados.
En los próximos días se publicará en el Boletín Oficial de la provincia (BOP) una convocatoria de manifestación de interés a la que deberán incorporarse los Ayuntamientos que deseen acogerse a las subvenciones de este programa. Pueden acceder todas las localidades de menos de 20.000 habitantes.
Antes de la presentación de Diputación Integra, el diputado de Cultura, Juventud y Deporte, Álvaro Sánchez Cotrina, y la diputada de Igualdad y Políticas Sociales, María Fé Plata, se reunieron con representantes de asociaciones para la discapacidad para informar de las actividades que en materia de inclusión está realizando la Diputación y para escuchar las propuestas y necesidades por parte de las Asociaciones.
La Diputación de Cáceres cuenta con otros programas. Recientemente se firmaron convenios con Aspace y Síndrome de Down. Dos jóvenes con diversidad funcional entrarán a trabajar en la institución, y ejercerán tareas de ordenanzas y funciones auxiliares.