La Diputación de Cáceres y el Grupo Tragsa investigan nuevas fórmulas de lucha contra la seca.

Diputación de Cáceres se ha sumado a un proyecto de I+D+i cofinanciado por el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) y el Grupo Tragsa, quien llevará a cabo, en los terrenos cedidos por la Diputación, una plantación experimental de alrededor de 1.200 encinas y alcornoques especialmente resistentes. Esta parcela abarca un total de 1,2 hectáreas y cuenta con una fuerte incidencia del hongo, lo que permitirá testar la resistencia de los nuevos ejemplares.

Para obtener estas encinas resistentes, el Grupo Tragsa, en colaboración con el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura, hizo un estudio previo en el que, mediante teledetección, localizó los árboles que habían sobrevivido a la enfermedad en las zonas de más alta mortandad. De entre ellos, se recogieron las bellotas de los más resistentes – los que habían dado más fruto – y se trasladaron a las instalaciones con las que cuenta el Grupo en Ourense.

Allí, en el vivero de Maceda, en colaboración con el Centro Universitario de Plasencia, un equipo de expertos en técnicas de vanguardia para la mejora de especies forestales sembró las bellotas y dividió los ejemplares en dos grupos: uno de ellos sería sometido a fuertes pruebas de estrés – sequía, inundación y exposición al hongo de la seca. El segundo grupo es el destinado a ponerse de nuevo a prueba en las parcelas infectadas en Cáceres. Tan solo los árboles más resistentes serán capaces de sobrevivir a estos experimentos y sus descendientes podrán ser utilizados para repoblaciones en la dehesa, ya que estos serán más tolerantes a la temida seca.

Además de la cesión de los terrenos, la Diputación de Cáceres ha ofrecido al Grupo Tragsa los recursos necesarios de maquinaria para realizar la preparación del terreno y el mantenimiento de los árboles, así como los recursos que puedan ser necesarios para el riego de los ejemplares, como cubas y tractores.